7 señales de Gaslighting en el trabajo y cómo combatirlo?

Introducción

Es habitual hablar del gaslighting en términos de amistades íntimas y relaciones de pareja. Sin embargo, muchas personas también sufren gaslighting en el trabajo. Cuando un compañero de trabajo o un supervisor te manipula y te hace dudar de tu propia cordura, memoria o creencias, es cuando está ocurriendo. Para hacerte cargar con la culpa de los hechos, el gaslighting puede rechazar acontecimientos anteriores, minimizar tus sentimientos o volver a contarlos.

Los gaslighters tienen cualidades de personalidad que trascienden las fronteras y encajan en muchos contextos sociales. El gaslighting en el lugar de trabajo es igual de dañino que en una amistad o relación de pareja.

Una vez dicho esto, ¿cómo saber si un compañero de trabajo te está engañando? ¿Qué debe hacer en estos casos? Le ayudaremos a encontrar soluciones para que pueda recuperar el control de su carrera profesional.

¿Qué es el gaslighting?

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Cuando alguien te hace dudar de tu propia memoria insistiendo en algo que ya sabes que es incorrecto, esto se conoce como gaslighting. Para reducir la probabilidad de que la víctima se dé cuenta del engaño forzado que se le está aplicando, esta estrategia se utiliza intencionadamente a lo largo del tiempo.

El gaslighting puede hacerte sentir indefenso y anular lo que ya sabes que es verdad, lo que constituye un tipo de manipulación emocional e intimidación. Los "gaslighters" son expertos en manipular la verdad y utilizar información precisa contra sus víctimas.

El gaslighting suele ser perpetrado en el lugar de trabajo por alguien en una posición de poder o por alguien que goza de simpatía, lo que hace que sea menos probable que las víctimas denuncien a ese compañero tóxico. Y cuanto más tiempo pase sin que se controle, más probable es que empieces a dudar de ti mismo sobre lo que es auténtico y lo que no.

Indicios de gaslighting en el trabajo

1. Verifica que lo que estás experimentando es realmente gaslighting

Examina tus experiencias. Los gaseadores intentan deliberadamente someter y dominar a sus víctimas haciéndoles dudar de su propia realidad y valor. Incluso sobre el papel, rebaten lo que han dicho. Se defienden constantemente proyectando sus defectos en otras personas. Su necesidad de mandar puede ser el resultado de diversas enfermedades, como la ineptitud, el nerviosismo, el narcisismo, la envidia o la simple mezquindad. Si este es tu caso, las probabilidades de que sufras gaslighting en el trabajo son altas.

2. Constantemente te llegan comentarios negativos

Si alguien le dice constantemente algo injustificadamente malo sobre cómo le va en el trabajo, probablemente tenga entre manos a un maltratador psicológico. La falta de crítica constructiva es un claro indicador de gaslighting en el trabajo.

A veces también pueden hacerte sentir como un impostor, lo que puede afectar seriamente a tu rendimiento.

Sin embargo, los comentarios negativos pueden ser difíciles de evaluar, sobre todo si proceden de tu jefe o de otra persona con autoridad. Determina si sus críticas son acertadas.

Habla con un miembro del equipo para ver si la información que recibes indica gaslighting. Pregúntales si están de acuerdo después de describirles todo lo que ha dicho tu jefe. Tal vez puedas convencer a tus compañeros de que te apoyen para plantar cara al "gaslighting" si ellos también creen que la negatividad persistente es injustificada.

3. Busque a su alrededor experiencias similares a las que se hayan enfrentado otras personas

El abuso de un gaslighter en el trabajo se dirige ocasionalmente a un solo empleado. Con frecuencia se fijan en muchas personas en su camino y también las engañan. Por lo tanto, haz averiguaciones. ¿Cómo se lleva su supervisor con los demás miembros del equipo? Pregunte a sus compañeros de trabajo si estarían dispuestos a documentar el comportamiento de gaslighting si afirman haber sido objeto de un nivel de trato similar. De este modo, no serás sólo tú quien se queje. Ten en cuenta que el poder viene en número.

4. No se le invita a las decisiones importantes

El gaslighter te excluirá de conferencias, discusiones y proyectos cruciales sin darte nunca una justificación convincente. Intentarán convencerte de que estás exagerando o de que estabas mal informado y no necesitabas participar en esa conversación cuando preguntes por qué no participaste. Te convencerán de que algo no es importante, incluso cuando sí lo es para el trabajo que estás realizando.

Puede ser un síntoma de que te están haciendo luz de gas si sientes que siempre te dejan de lado, especialmente en el caso de quienes trabajan a distancia.

5. Le resulta difícil desafiarles

Estás actuando de forma irracional: "¿No crees que estás reaccionando con demasiada fuerza?". Con estos comentarios, el agresor no sólo disminuye tus sentimientos, sino que también abdica de la responsabilidad de sus actos. Empiezas a creer que la culpa es tuya.

Además, le hacen dudar de su inteligencia y sentirse loco por hablar, lo que aumenta la probabilidad de que siga ignorándolo.

6. Te trasladan constantemente a proyectos más pequeños y sin importancia

Puede que descubras que te están dando trabajo ocupado, esas tareas sin sentido que te mantienen ocupado pero que no tienen ningún impacto real. Esto podría ser un intento de socavar tu influencia y obstaculizar tu rendimiento para que, cuando lleguen las evaluaciones, no tengas nada que demostrar porque nunca recibiste ningún trabajo que mereciera la pena y no tendrás ningún logro del que hablar.

7. Oyes rumores falsos

Hablando a sus espaldas, el gaslighter puede intentar socavar su visión de la realidad. Poniendo a tus colegas en tu contra, el gaslighter puede mantener el control de la situación y hacerte sentir mal.

Si oyes rumores falsos, intenta averiguar de dónde proceden. Podrías encontrar al gaslighter oculto. Tienes derecho a defenderte y a desmentir cualquier rumor, sea cual sea la situación.

¿Cómo combatir el gaslighting en el trabajo?

1. Busca ayuda y ponte a ti primero

Dedícate un tiempo a pensar en tu autocuidado mientras abordas tu problema de gaslighting. Reconoce que no tienes la culpa de las circunstancias y que no has hecho nada malo. Habla con un tercero neutral, no con alguien de tu organización. Puede ayudarte a mantener el comportamiento dañino en perspectiva sin interiorizarlo.

Para cambiar de mentalidad y adoptar una más optimista, concéntrate en reducir la autoconversación negativa. Vuelve a asegurarte a ti misma que no estás loca y que el maltrato que estás sufriendo no es nada que te merezcas.

2. Solicitar la opinión de otra persona

Encontrar a alguien en quien puedas confiar y que no esté del lado de quien te acosa es crucial en esta situación. Esto puede ser difícil, sobre todo si tu lugar de trabajo es tóxico en general.

¿El gaseador señala "defectos" en tu trabajo todo el tiempo? Pide un segundo par de ojos para que revisen esos supuestos errores.

¿Sigue afirmando el gaseador que nunca has recibido críticas a tus espaldas, delante del equipo? Pregúntale a alguien que estuviera presente cuando se hizo esa crítica.

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3. Lleve un registro de sus conversaciones

Cuando hables con tu supervisor, asegúrate de tomar notas y llevar un registro de la conversación. Utiliza tantos medios de comunicación como sea posible para registrar y documentar lo que se ha dicho o cambiado. Cuando sea posible, haz que haya testigos presentes durante las reuniones o añade la dirección de correo electrónico de un compañero como copia en los correos electrónicos. Si puedes, sé lo más explícito posible cuando hables. Será más difícil que tu supervisor dude de tu integridad y rompa los acuerdos si tienes un registro en tiempo real de tus encuentros. De este modo, también podrá determinar si realmente le están dando gas.

4. Informarse sobre el gaslighting

Es difícil no tomárselo como algo personal. Sin embargo, hay que reconocer que el problema está en los gaslighters. Intentan controlarte, normalmente para recuperar el control de sus propias vidas o mejorar su baja autoestima.

Sin duda, no hay justificación para un comportamiento malsano. Sin embargo, podrás tomarte su comportamiento de forma menos personal y recuperar algo de control en la relación si ves sus actos a través de ese prisma.

5. Alza la voz contra las acciones falsas

El gaslighting es eficaz porque te deja perplejo y mina tu confianza. La persona que intenta ridiculizarte puede llegar a la conclusión de que no merece la pena si le demuestras que su comportamiento no te molesta.

El gaslighting suele incluir insultos y mentiras, además de engaños y mentiras. Puedes hacerles saber que no vas a tolerar esa conducta denunciándola de forma educada y clara. No dudes en decir lo que piensas, porque eso hará que te respeten más.

Podrían intentar encubrir los insultos con bromas o utilizar la frase "sólo intento ayudar". Podrían descubrir que estas tácticas no funcionan contigo si les pides que aclaren el chiste como si no lo entendieras.

Por todo ello, los empleados suelen sentir que no se les aprecia, lo que puede frenar su productividad. Así que asegúrate de combatir este comportamiento y fomentar una cultura general de agradecimiento a los empleados.

Reflexiones finales

El gaslighting en el trabajo puede ser difícil de manejar. Tu bienestar físico y mental puede resentirse drásticamente y, en ciertos casos, puede ser difícil saber si el comportamiento es controlador y manipulador. Sin embargo, esperamos que puedas recuperar la influencia y enfrentarte al gaslighter en tu vida ahora que eres consciente de las señales.

Sería una buena idea buscar medidas adicionales para mejorar tu lugar de trabajo y el bienestar del personal después de tratar con el gaslighter.